Acogedora y festiva, culta e histórica, Tailandia ofrece desde llamativos templos y playas tropicales hasta la siempre reconfortante sonrisa de su gente. Se encuentra ya entre los diez destinos más visitados del planeta.
Visitar las antiguas capitales históricas del Reino del Siam Ayutthaya y Sukhothai, un legado histórico artístico que tiene su contrapunto perfecto en Bangkok, una metrópoli vitalísima, sofisticada y en perpetuo cambio que es referencia para toda Asia.
Alabada en todo el mundo, la cocina tailandesa es deleitante desde sus puestos callejeros hasta sus clases de cocina privadas o en restaurantes exclusivos.
Mientras que al norte, el viajero más introspectivo encuentra relucientes templos y budas dorados, que enmarcan tanto los entornos rústicos como los modernos, y puede sumergirse en retiros de meditación; en el sur, los spas de Koh Samui y el ambiente playero lo hacen un destino perfecto para los lunamieleros y las familias.