Para la mayoría, los Emiratos Árabes Unidos significan: Dubái y Abu Dhabi. La primera, ciudad de ciencia ficción con rascacielos icónicos, islas en forma de palma, centros comerciales del tamaño de una ciudad, pistas de esquí cubiertas y balnearios palaciegos. Pero cada uno de los seis emiratos cuenta con su propio encanto.
Abu Dhabi alberga el primer Museo de Louvre fuera de Francia, una mezquita de belleza etérea, la montaña rusa más rápida del mundo y una pista de fórmula uno. Dubái redefine el lujo futurista, dinamismo cultural, innovación y diseño. Los viajeros suelen hacer esta parada obligada “entre escalas” de 3-4 días hacia otro destino.