SUDESTE ASIÁTICO Y LEJANO ORIENTE.
Suvarṇabhūmi es la mitológica tierra dorada de la que hablan muchos textos antiguos para referirse al Sudeste Asiático. Envuelto en selvas tropicales, bordeado por arenas doradas, coronado por volcanes, salpicado de ruinas de civilizaciones perdidas, gastronomía exquisita y espiritualidad de tradición: este es el sudeste asiático como siempre lo has imaginado.
Destino ideal para viajar solo, en pareja, familia o amistades. Suele ser uno de los “hot spots” para lunamieleros que desean algo más allá de lo convencional. Fusión perfecta entre lo ancestral y lo contemporáneo.
Lejano Oriente, ya sea que se combine con el Sudeste Asiático o no, es imperdible para el viajero sofisticado. Mientras Japón ofrece un refinamiento absoluto para los sentidos, Mongolia es la máxima representación de la vida nómada y de lo inexplorado.